Preguntale a la tia Emmett!!!! xD

si subire todos los que pueda aquii les dejo estoss


Querida Tía Emmett, ¿alguna vez te has vuelto loca con una película o un programa y has empezado a gritarle a la tele para que luego venga alguien y crea que estás loca? Gritador de películas.

Querido Gritador de películas.

¡Bueno, y quién no! ¡Yo grito con deportes, concursos, telecomedias, y con cualquier otra cosa! Espera, ¡creo que le oigo llamarme! Ah no, sólo era la alfombra de Edward- ¡Cállate Sr. Alfombra de Edward! Ya te lo he dicho, ¡no te voy a comprar galletas!

Vale, lo siento. ¡Pero es que oigo la tele! Tengo que ir.

(En el cuarto con una tele)

- ¡¡No!! ¡No! ¡Así no es cómo se hace! ¡Qué estáis haciendo! ¡Me dais asco teletubbies! No, ¡se supone que debéis usar vuestros rayos mentales para vencer a los malvados conejitos! ¡No adoptarlos! ¡¡Sencillamente os van a comer!!- grité, y Edward, Bella y Charlie vinieron.

Espera, ¿Charlie? ¡Él no vive aquí! Eché un vistazo alrededor ¡y me di cuenta de que estaba en la casa de Bella!

- Emm, hola jefe Swan.

- Emmett, ¿qué estás haciendo? –preguntó Charlie.

- Viendo los teletubbies. ¿Qué es lo que parece?

Me miró como si estuviera a punto de decir algo aburrido, así que le frené dándole un abrazo.

- ¡Necesito volver a la estación! Eh, me necesitan ahí, eh ahora.

- ¡Adiós! –grité. Se fue en un suspiro a la estación. Debe de ser una emergencia.

- ¿Qué estás haciendo? –preguntó Edward.

- ¿Cuántas veces tengo que responder a esta pregunta? ¡ESTOY VIENDO LOS TELETUBBIES!

Entonces Bella dijo- Así que, ¿les estás gritando?

- ¡Él lo empezó!

- ¿Qué?

- Sí, su nombre es Fluffer Nutter.

- ¿Fluffer Nutter?

- Sí, y hoy está siendo grosero.

- ¿Cómo de grosero? –preguntó Edward.

Luego oí a Fluffer Nutter decir algo- ¿Qué me llamaste?

- La cosa más grosera que nunca he conocido. ¡No te quiero ver nunca más! –entonces Edward y Bella se fueron para dejarme sumido en la pena.

- ¿Cómo puedes hacerme esto?

- Eso es, estoy fuera de lugar –dije mientras me volvía a mi casa. Entré y cerré la puerta. Espera un momento, ¡esta no es mi casa! ¿De quién es? ¡Oh no, no puede ser! Es… ¡es la casa de Mike Newton! ¡Y ahí estaba Mike bajando las escaleras arrastrándose hacia mí!

- Emm… Hola Mike.

- Me gusta tu sombrero de vaquero rosa, te pega con los ojos –dijo Mike. Me olvidé completamente de que había comprado un sombrero de vaquero rosa para ocultar mi calvicie.

- Gracias.

- Eres guapo.

- Eh, ¿Mike?

- ¿Sí?

- ¿Puedo preguntarte algo?

- ¡Lo sabía! ¡¡Sabía que me ibas a preguntar esto algún día!! ¡Estoy tan feliz! ¡Sí! ¡Sí, sí, sí! Creo que deberíamos tener una boda formal…

¡Escuché demasiado! Me escapé de ahí lo más rápido que pude hasta que finalmente encontré mi casa. Estaba a salvo. Entonces Jasper vino de la cocina y me tendió el teléfono.

- Es Mike Newton –dijo.

- ¿Hola?

- Emmett –sollozó- ¿Adónde fuiste…? -Colgué el teléfono y me escondí en mi habitación. Ojalá Fluffer Nutter no se ría de mi sombrero de vaquero rosa… (de vuelta a la carta)

¿Cuál era la pregunta? Cualquiera que sea sí. Ahora mismo necesito esconderme de Mike. Ha estado acechándome desde ayer, hablando de planes de boda.

-Emmett




Querida Tía Emmett

Cuando Edward, Jasper, Carlisle y Esme van de caza, ¿le cantas a Bella para que se duerma como hace Edward?

Con amor,

Adormilada

Querida Adormilada,

¡Busca una cama si estás tan cansada! ¡No quiero enterarme de tu vida! ¡Pero de todos modos lo hago! Hablando de eso, ¡debo hacerlo ahora mismo!

(Emmett está llamando a Alice y a Rose)

- ¡Rose, Alice! ¡Bajad! ¡Tenemos que ir a la casa de Bella para verla dormir!

Vinieron en menos de un latido. ¡Vamos!

En la casa de los Swan…

Trepamos y entramos por la ventana, donde dijimos- ¡Hola Bella!

- ¡Emmett! ¡Me has asustado! –gritó Bella- Bueno, tengo que irme a dormir.

- ¡Ok! ¡Entonces te cantaré mi súper alucinante nana para que te duermas! –dije.

- Emm… ok –dijo.

- WIHU WIHU WIHU WIHU

- Emmett, ¿por qué estás haciendo el ruido de una ambulancia?

- ¡Esa es tu nana! ¿No te gusta? –pregunté con ojos de cachorrillo.

- Em, no, no hay ningún problema. Tu nana está bien.

- ¡Ok! ¡WIHU WIHU WIHU WIHU! ¡Solo de guitarra invisible! ¡NE NE NE NE NE NAH NAH NAH NAH! –grité mientras tocaba una guitarra invisible. Después estampé mi guitarra en el suelo. Levanté la vista hacia Bella para ver que ella ya estaba durmiendo.

- Ahh… Sabía que mi nana la haría dormir.

- Guau, nunca pensé que pasaría –dijo Alice.

- Creo que debería tumbarme junto a Bella –dije mientras me echaba cuidadosamente en la cama.

- ¡Esta cosa es muy cómoda!

Entonces Alice se sentó en la cama a los pies de Bella, mientras Rose empezaba a reordenar sus cosas.

- Edward, ¿por qué no me dejas comprarme una pistola? –murmuró Bella.

Alice susurró- ¿Por qué quiere Bella una pistola?

- Bella, ¿por qué quieres una pistola? –dije muy suavemente.

- Para disparar al mago –dijo.

Reí muy fuerte, lo que desgraciadamente hizo que Bella despertara.

- ¡¿Qué es lo que hacéis aún aquí chicos?! –gritó- ¿Emmett? ¿Qué estás haciendo en mi cama?

Antes de que pudiera decir algo, cogió el teléfono y marcó el número de Edward.

Él lo cogió al primer toque- ¿Bella?

- ¡Edward!

- ¿Qué es lo que pasa?

- Yo…

- ¡Qué! –dijo.

- ¡Dormí con Emmett, y Alice y Rose estaban mirando!

Oh oh.

- ¡¡EMMETT!!

- Emm… ¡Bella! ¡Tengo que irme! Dile a Oso Mimoso que le quiero.

- ¡¿CÓMO ME HAS LLAMADO?! –gritó Edward.

- ¡Vamos! –gritó Rose.

Saltamos por la ventana y empezamos a correr.

- ¿Qué estamos haciendo? –preguntó Rose.

- ¡No lo sé pero sigue corriendo! –grité.

(De vuelta a la carta)

Espero que haya respondido a tu pregunta. Por si te lo preguntas, estoy en Ohio escondiéndome de Edward. ¡Oh no! Aquí viene…

-Emmett


Querida Tía Emmett,

Estoy deprimido. He estado pensando en suicidarme también. Me estaba preguntando, ¿sabes cómo se siente uno al suicidarse? ¿Alguna vez lo has intentado?

De,

Estoy deprimido.

Querido Estoy deprimido,

¡Ya lo he pillado! ¡Estás deprimido! ¡¡Deja de repetírmelo!!

¿De dónde me sé esa palabra? ¡Ya sé! ¡Es la palabra secreta de hoy! ¿Y qué tienes que hacer cuando alguien dice la palabra secreta? ¡Gritar muy alto! ¡Sí!

Vamos a intentarlo.

¡Emmett está llamando a Bella!

- ¿Hola? –dijo cansinamente Bella.

- ¿Bella? Creo que voy a matarme. Estoy demasiado deprimido para seguir con mi vida.

- ¿VAS A SUICIDARTE? EMMETT…

- ¡¡AHHHHHHHHHHHH!! –grité.

- Emmett, ¿qué pasa?

- ¡Has dicho la palabra secreta de hoy!

- ¿Quieres decir suicidarte?

- ¡¡AHHHHHHHHHHHHH!!

De repente, cortó. Uff, a veces es tan grosera.

De todos modos, ¡necesito averiguar si matarte es divertido! ¡Sé exactamente a quien preguntar! Ya lo ha intentado varias veces, ¡así que tal vez puede ayudarme!

Caminé hasta la habitación, y cerré la puerta con cuidado.

- ¿Sr. Alfombra de Edward?

- ¿Quién se atreve a molestarme?

- Soy yo, Emmett.

- Ah, hola Emmett. Fui a tu sicóloga, y es fabulosa. ¡Ya estoy bien! Y ahora ¿qué necesitas?

- Bueno me estaba preguntando, ¿es divertido matarte a ti mismo?

- ¿Quieres decir suicidarte?

- ¡¡AHHHHHHHHHHHHH!!

- ¿Era esa la palabra secreta de hoy?

- ¡Sip!

- ¡Guay! De todos modos, no creo que debas matarte a ti mismo Emmett. Tienes una fantástica vida por delante…

Genial, otra charla aburrida de la alfombra de Edward. ¿Por qué siempre vengo a por su ayuda?

- Así que –dije-, ¿cuál es la mejor manera de matarte a ti mismo?

- Supongo que tirándote desde un edificio.

- ¡Vale! ¡Gracias alfombra de Edward!

- ¡SR. Alfombra de Edward para ti!

- Perdón.

Entonces corrí hasta la habitación donde todos (incluida Bella) estaban sentados.

- ¡Adiós chicos!

- ¿Adónde vas? –preguntó Edward.

- Bueno, Dr. Oso Mimoso, voy a matarme.

- ¿Quieres decir suicidarte?

- ¡¡AHHHHHHHHHHHHH!!

Entonces corrí hasta pasar la puerta y me metí en el jeep. Estaba a medio camino del edificio más cercano, cuando vi que alguien me seguía.

Finalmente, llegué al edificio. Subí corriendo los escalones hasta llegar a la terraza, donde vi que la gente se empezaba a amontonar alrededor del lugar.

- ¡No lo hagas hijo! –gritó un policía.

- ¡No soy tu hijo! –grité al tiempo que saltaba del edificio.

¡Maldición, algo paró mi caída! ¿Qué fue? Me levanté para ver que había aterrizado en Jasper.

- Ups –dije.

- ¡¡Emmett!! –gritó Esme.

- Lo siento –dije-. Sólo quería ver si era divertido.

- ¿Y lo fue? –preguntó.

- ¡Fue increíble!

- ¿Emmett? –dijo Jasper.

- ¿Sí? –dije.

- ¡QUÍTATE DE ENCIMA MÍO!

- Vale.

De vuelta al carta

Así que, Deprimido, tírate desde un edificio. ¡Es la manera más divertida de suicidarte! ¡¡AHHHHHHHHHHHHH!!

-Emmett






Querida Tía Emmett,

¿Por qué quieren los gérmenes hacernos daño? ¿Por qué existen? Quiero decir, sólo consiguen enfermar a la gente, tengo miedo de tocar cualquier cosa y, y, y, ¡son tremendos!

Firmado,

Odio a los Gérmenes

Querido Odio a los Gérmenes,

¿Eso hacen los gérmenes? ¡Oh no! ¡Enfermaré y moriré! Y entonces nadie volverá a ver mi imponencia . ¡Tengo que pararlo!

Tres días después…

¡Ja ja! ¡Eso os detendrá estúpidos gérmenes!

- ¡Emmett! ¿Por qué está tu habitación cubierta con plástico para embalar? –preguntó Rose.

- ¡Gérmenes! –grité mientras la rociaba con una manguera.

- ¡Mi pelo!

- Bueno ¡es un precio que hay que pagar para que los gérmenes no te infesten!

- ¡Ahhhh! –gritó Rose- ¡¿Qué es esto?! –dijo levantando un traje de plástico para embalar.

- ¡Es nuestra protección!

- ¿De qué?

- ¡De los gérmenes! ¡No queremos enfermarnos! ¡Están en todas partes!

- ¡Emmett! ¡Ya basta con los estúpidos gérmenes!

- ¡¡SHHHHHH!! ¡Te pueden oír!

- ¿Emmett? Eres un vampiro, ¿vale? Eso significa que eres inmortal, ¡no puedes morir por los gérmenes!

- ¡Tu sólo dices eso para que me sienta mejor! ¡Voy a hablar con alguien que me entienda! –chillé mientras corría hacia la habitación de Edward.

- ¿Sr. Alfombra de Edward? –pregunté.

Nada.

Volví a preguntar. Nada.

- ¡¡NOOOOO!! ¡Los gérmenes te cogieron! –grité- ¡Yo soy el siguiente! ¡Están detrás de mí, voy a esconderme!

Cinco días después…

BELLA POV

Edward me invitó hoy a comer a su casa. Dijo que era porque Emmett había desaparecido. Me pregunto porque Edward dice que Emmett es su hermano favorito si lo odia tanto.

- ¿Pasa algo malo Bella? –preguntó Esme.

- Ah, sólo tengo sed –dije. Jasper y Edward se empezaron a reír.

- Bueno deja que vaya a cogerte algo para beber.

- No, está bien. Ya lo hago voy yo –dije mientras caminaba hacia la cocina.

Me preguntó dónde guardarán sus tazas. Abrí un armario y grité.

- ¡Emmett! ¡¿Qué estás haciendo en el armario?!

- ¡Estoy escondiéndome! –dijo.

- ¿De qué?

- ¡De los gérmenes! ¡Pueden matarte, ya sabes!

- ¡Emmett! ¡Cuándo aceptarás el hecho de que eres un vampiro! Los vampiros no mueren por este tipo de cosas –dije.

- ¡Ah! –dijo él- Entonces ¿qué le pasó al Sr. Alfombra de Edward?

- ¡Yo puedo explicarlo! –dijo Edward apareciendo de ningún lado.

- ¿Qué está pasando? –dije.

- Emmett –dijo Edward ignorando completamente mi pregunta-. Mi alfombra ha desaparecido. ¡No la encuentro por ningún sitio! Lo que ves en mi habitación es simplemente una triste réplica.

EMMETT POV

¡¿El Sr. Alfombra de Edward ha desaparecido?! ¿Cómo puede ser? ¿Hice algo mal? ¡Debo encontrarla!

De vuelta a la carta

Así que, ¡jaja! ¡Tú puedes morirte por los gérmenes y yo no! ¡Jajaja! ¡Ahora debo encontrar al Sr. Alfombra de Edward!

-Emmett



uerida Tía Emmett,

¿Celebras todas las fiestas religiosas?

Con cariño,

Religiosa

Querida Religiosa,

Si fueras religiosa, estarías rezando ahora mismo, ¿no? ¡Oh, sin respuesta? Eso significa que tengo razón. Bueno, pues claro. Festejo Navidad, Hanukkah, Kwana, El Día Mundial Nacional del Queso, ¡todas esas cosas geniales! ¡Ya es el nosecuántos de diciembre! ¡Eso significa que El Día Mundial Nacional del Queso ya casi esta aquí! Necesito prepararlo.

- ¿Emmett? ¿Por qué está nuestra casa cubierta de queso? –preguntó Rose.

- ¡Para preparar el EDMNQ! Cheesy Snacks (pato: como se refiere a un nombre no lo traduzco) sólo les da regalos a los que creen. Así que le estoy enseñando cuánto creo –dije.

- ¿Cheesy Snacks?

- ¡Tía! Todos saben que Cheesy Snacks vive en una fábrica de queso en Wisconsin haciendo regalos de queso a los niños/as pequeños que han sido buenos. Entra por tu ventana y deja de regalo tu queso más preciado. ¿No es fantástico?

- Sí, maravilloso –dijo Rosalie con tono sarcástico -. De todos modos ¿cuál es tu queso más preciado?

- Gouda. Porque suena como Buda –dije.

- Emmett, realmente no has sido bueno con nadie. ¿Y si no estás en la lista de los buenos de Cheesy Snacks?

- ¡Ja! Cheesy Snacks no tiene “lista de los buenos”, tiene un catálogo de la amabilidad.

- Pero ¿y si no estás en el catálogo de la amabilidad?

- ¡Tienes razón! ¡Necesito ser más bueno con la gente! ¡Empezaré propagando la ovación al queso!

En medio de la calle…

- ¡Feliz Día Mundial Nacional del Queso a todos! –grité.

- ¡Feliz Navidad, amables desconocidos! –dije tirándoles queso.

- ¡Que alguien llame a una ambulancia! ¡Es queso me ha matado! ¡¡Hombre herido, hombre herido!! –dijo una persona cualquiera.

¿Qué clase de queso era? Oh, vale.

- Perdona peque, pero ¿crees en el gran Cheesy Snacks? –pregunté.

- ¡Mamá! ¡Mamá! ¡¡Extraño Peligro Extraño Peligro!! –gritó el niño pequeño. ¿Qué hago? ¿Qué hago?

- Toma niño, un calcetín –dije dándole mi calcetín. Entonces el niño empezó a llorar.

- ¿Qué pasa? –pregunté.

- Este calcetín está muerto –contestó el niño pequeño.

- Debemos hacer un funeral –dije.

En el cementerio…

- Era un buen y amable calcetín. Siempre ahí, para cualquiera. Dispuesto a ayudar a cualquier pie frío de por ahí. Todos le recordaremos, en nuestros corazones –dije.

- ¡¡Nooooo!! ¡Calcetincito! ¡No me dejes! ¡No mueras! –gritó la esposa de Calcetincito.

- Siento tu pérdida –le dije.

En la casa de los Cullen…

Ahora a esperar.

El día siguiente…

- ¡Todos! ¡Debemos ver que nos trajo Cheesy Snacks! –grité. Lentamente, todos vinieron. Yo abrí mi regalo el primero.

- ¡¡Sí!! ¡Es un Gouda Buda! –dije- ¿Y a vosotros qué os ha traído?

- American Cheese –dijo Jasper.

- Mozzarella –dijo Alice.

- Pepper Jack –dijo Esme.

- ¿Queso azul? –dijo Carlisle, todavía dudando de la autoridad de Cheesy Snacks.

- ¡Queso cremoso! –dijo Bella.

- ¿Cómo es que estás aquí? –pregunté.

- Llegué aquí y vine, como yo quise –contestó-. ¿Tú que tienes, Edward?

- Tengo espinacas –dijo.

- Yo también –dijo Rose.

- ¡Alguien está en el catálogo de la grosería! –dije.

- ¿Qué? –preguntaron.

- ¡Tío! Si has sido malo, te regalan espinacas asquerosas que vienen de las alcantarillas –dije.

- Tremendo –dijeron.

- Bueno, ¿sabéis qué más es tremendo? ¡Vuestra cara! –dije.

- ¡Alguien te ha traído una cubertería de plata justo porque te ibas a servir! –dijo Bella.

- ¡Oh sí! ¡Choca los cinco! –dije mientras chocábamos.

De vuelta a la carta…

Si no fuera una persona culta, no tendría un Gouda Buda, ¿no? ¡No! ¡Feliz Día Mundial Nacional del Queso a todos!

-Emmett

jajajja me mato de la risa sube mas plis!